Mirando Al Mar

¡Romántica, romántica y romántica! En principio es la mejor y más ajustada definición. Una historia de amor, de esas que enamoran al leerlas. Te gustará, seguro.Pero siempre hay algún pero que en este caso es para no empalagar en exceso, porque puedes cansarte de tanto dulce y porque la vida no es todo el tiempo de color de rosa.La vida de Laura, la protagonista, es en su infancia dura y en una ambiente nada recomendable. Crece en centros de acogida hasta que doña Blanca se ocupa de ella, aunque de manera muy particular, y Laura vive interna en un colegio de monjas su adolescencia. Deesta parte de la historia no cuento más.El protagonista, el chico, no es ya un muchacho, sino un hombre ya maduro que harto de vivir en solitario decide dar un cambio radical a su vida y buscando la luz se traslada a la costa mediterránea. Encuentra amigos que llegan a ser parte importante en su existencia y tanto es así que se implica en tratar de ayudarles y hace suyo su dolor. Descubre que es mejor compartir con tus semejantes que ignorarlos.La mala , porque siempre hay alguien que lo es, aunque en este caso no lo es tanto como parece, es doña Blanca. De fuerte personalidad y principios inamovibles, mantiene sus sentimientos acorazados para mejor poder llevar a cabo sus objetivos como madre de seis hijos y viuda.También tendrás un paseo por las fallas de Valencia, fiesta única, explosión de arte, color ymúsica. Genial para disfrutar.No digo más porque desvelar lo que tienes que descubrir al leer no tiene gracia, solo decirte que hay más personajes y cada cual aporta su grano de arena a esta historia para dar como resultado una bonita novela, que aunque sea romántica, romántica y romántica, es mucho más que eso y deja un buen sabor. Nos muestra distintas clases de amor: el amor de la pareja, el delos amigos, el filial entre padres e hijos y demás familia cercana. De todos sabemos un poco o un mucho y podemos sentir cercanía con algún personaje y cuando…